Urge un giro “sudafricano” al conflicto palestino-israelí

Decía Pannekoek que no existen los pueblos, sólo las clases. Aunque creo que su afirmación no es cierta, puede servirnos como recordatorio de que, más allá de la lucha entre pueblos, existe siempre una lucha entre clases. Y es seguramente en la resolución de las contradicciones de éste segundo tipo de enfrentamiento donde se haya la respuesta a las contradicciones entre pueblos.

Ayer leíamos la trágica noticia de la masacre que el Estado de Israel había cometido en Gaza, matando a más de 230 personas.

Previsiblemente esto hará que los cohetes hacia la parte israelí se multipliquen en busca de venganza. Sangre de civiles que no solo no logrará consumar revancha o satisfacción alguna, sino que dará aliento a quienes de muy buena gana perpetrarían masacres como la de ayer todos los días.

Ante este panorama se hace necesario vislumbrar que más allá de un conflicto entre pueblos existe un conflicto donde hay unas personas excluidas de sus derechos civiles (incluido el derecho, más que civil, a vivir en paz) y otras personas que las excluyen. Y es en ese conflicto en el que debemos buscar la solución a esta terrible situación.

Que se divulguen las palabras del Primer Ministro israelí Ehud Olmet, que decía que «si llega un día en el que la solución de dos Estados se viene abajo y nos vemos obligados a enfrentar una lucha de tipo sudafricano por la igualdad de derechos civiles (que incluya a los palestinos de los territorios ocupados), entonces, cuando llegue ese día, será el fin del Estado de Israel». Esta misma persona repetía en 2003 que «tenemos los días contados. Cada vez más palestinos ya no se interesan por una solución negociada de dos Estados, ya que desean cambiar la esencia del conflicto y pasar de un paradigma de tipo argelino a un paradigma de tipo sudafricano; de una lucha contra ‘la ocupación’, como dicen ellos, a un combate del tipo ‘un hombre = un voto’ que es, sin duda, una lucha mucho más clara, mucho más popular y, finalmente, mucho más poderosa»

Se hace necesario avanzar hacia un Estado laico de amplia tolerancia religiosa donde resolver las contradicciones existentes. Nadie hay más interesado en mantener la “consigna de los dos Estados” que los sionistas que ayer acabaron con la vida de más de 230 personas.

[Entrada relacionada en "El Hijo Rojo": Abandonar la consigna del Estado palestino independiente]

11 comentarios:

rafa hortaleza dijo...

efectivamente, tienes razón.

Anónimo dijo...

es muy cierto Kaneda, pero ese camino implica reconocer como legítimo al ocupante y la ocupación. Y eso es un ricino muy muy amargo de tragar.

Anónimo dijo...

A mí esta solución no me convencía por el trágala que supone, tal y como muestra ceronegativo. Pero algunos amigos que han estado en Palestina últimamente me dicen que es la única solución: Palestina está completamente desestructurada y al borde del colapso. Además, la división en dos franjas dificulta muchísimo una gestión política unitaria. Estos amigos me decían que o se da ese giro sudafricano o Palestina perecerá en poco tiempo.

Anónimo dijo...

Gran post compañero

Fabio

Javi dijo...

@ rafa: recibe un cordial saludo.

@ cero: sí, supone tragar, pero la realidad es que la ocupación israelí no es una ocupación al uso. No es como la de los yankees en Iraq, y tampoco igual que una ocupación colonial habitual, como la de los franceses en Argelia...así que las recetas tienen que ser distintas también. Modelo de liberación a la argelina o modelo sudafricano, esa es la elección. El argelino parece que está fracasando una y otra vez, seguramente la esperanza que queda es el cambio en la estrategia.

@ Hugo: muy de acuerdo.

¡Recibid todos un saludo!

Curro Corrales dijo...

Acertadísimo 'post', en las circunstancias actuales, lo único que se está tragando Palestina es un muerto detrás de otro. Es imprescindible que una solución como la que apuntas cobre cada vez más peso como opción real. Es cierto que nadie ha condenado como se merece a Israel, pero no es menos cierto que los gobiernos occidentales -esos que jamás permitirían una solución 100% justa para Palestina y por tanto que se reconociese como ilegítimo el papelón israelí- no han podido dejar de valorar la acción como desproporcionada -excepto Estados Unidos, claro-. Ello nos da una idea de que la propia credibilidad de Israel, a pesar de todos los intereses que tiene a su favor, empieza a ser muy poquito sostenible. La solución a lo sudafricana tiene la parte de traición a la causa palestina que conlleva cualquier pragmatismo, pero es tan oportuna y necesaria que hemos de valorar todo lo bueno que tiene: es una propuesta transversal, integradora y realista. Veamos.

Anónimo dijo...

El problema en la zona de Israel y Palestina es sólo uno, Israel en sí mismo.

Soria dijo...

Me encantan los mensajes de corte antisionista que rezuman algunos de tus conmilitones, xD.

El problema del conflicto palestino-israelí es que unos no reconocen la existencia de un Estado y lanzan misiles indiscriminadamente y otro ve la necesidad de demostrar su fuerza para no ser destruido por todos los países que le rodean.

La religión pues...esto que...sí, bueno, vale.

Javi dijo...

@ Curro: muy de acuerdo.

@ Dhitam: la existencia de Israel es la causa/problema de todo el resto de problemas, pero desde luego que problemas hay unos cuantos. Quién y cómo gestiona el poder en la ANP es también un problema. Con la OLP había alguien que parece que podía contener mínimamente la violencia y llegar a acuerdos con el enemigo, con Hamas desde el primer momento eso saltó por los aires. 'Quicir', como en todo panorama complejo, problemas hay unos cuantos.

@ Soria: anda que no es simplista tu análisis ni ná...

Soria dijo...

Es que el análisis podría haber sido más profundo si no llevásemos ya...¿cuántos procesos de paz?

La postura que se toma habitualmente es ir con Palestina, emulando a Inglaterra. Siempre con el más débil, hay que mantener el equilibrio. Ahora bien, ¿por qué matan los árabes a judíos? ¿Por Jerusalén? ¿Porque son una nación oprimida bajo yugo sionista y blá blá blá? No, matan porque Hamás está ahí como un cáncer, es una gran mafia que reparte dinero a la vez que mata a todos aquellos que no son de los suyos, ¿o se nos ha olvidado la guerra civil entre Hamás y Al Fatah?

Javi dijo...

"Procesos de paz" ha habido en puridad pocos o más bien ninguno. En mi siguiente entrada desarrollaré más este punto, pero no se puede hablar de "proceso de paz" a negociaciones sobre cómo mantener un Estado judío que se extienda sobre el 90% de la Palestina del Mandato. Los acuerdos de Madrid y de Oslo, Camp David, Tenet, Génova...no son "procesos de paz". Son acuerdos para la "ghettificación" de una parte de la población de un lugar, donde había una parte negociadora muy fuerte y otra muy débil. Eso y la paz son extremos opuestos.

Y Elias, y el conflicto tal y como lo conocemos existía muuuuuchos años antes de que Hamas existiera, así que no jodas con eso.