El culo inquieto

Todos los medios andan agitados con la altísima cifra que ha pagado el Real Madrid por el fichaje de Cristiano Ronaldo en plena época de crisis. Unos se preguntan cómo habrá conseguido los avales, otros si Florentino Pérez será capaz de recuperar la inversión, y otros, más profundos, se cuestionan sobre si es “moral” gastarse esa millonada en contratar a un futbolista.

Por la mañana Susana Griso preguntaba en su programa a uno de los tertulianos sobre la moralidad del desembolso, más tarde vi que un articulista en el Sport afirmaba que el dinero desembolsado por Cristiano Ronaldo era “una auténtica inmoralidad”, e incluso en la portada de El Mundo señalaba la barbaridad cometida al indicar que lo que se pagó por él equivalía a “57 veces su peso en oro”.

Pese a que muy poca gente es capaz de imaginar un sistema distinto del actual (hasta el punto de considerarse al capitalismo como algo parecido al modelo productivo que es inherente al ser humano) hay algo dentro de las personas que chirría cuando el capitalismo muestra a plena luz algo que, aunque no de una forma tan llamativa, es el pan nuestro de cada día.

La gente se revuelve tímidamente en su asiento cuando ve que toneladas de fruta son arrojadas al mar mientras que es conocedor de los millones de humanos que padecen hambre. Les escuece saber que sus zapatillas deportivas son cosidas a mano por niños asiáticos mal pagados en jornadas laborales interminables. Sienten que algo no anda bien cuando en el mismo país en el que casi nadie consigue un crédito bancario para casi nada, los bancos le prestan al Real Madrid 94 millones de euros para fichar a Cristian Ronaldo. Nos dicen que es de necios confundir valor y precio, mientras nos muestran incesantemente que las cosas valen lo que se pague por ellas.

Pese a las cientos de horas dedicadas a hacernos incapaces de vivir emocionalmente las injusticias que se generan por el modelo productivo, pese a todo el esfuerzo gastado en enseñarnos a cómo ser cómplices de todo un sistema de crímenes y a la vez ser capaces de dormir por las noches sin tener mala conciencia…pese a todo eso, no somos capaces de que se nos quede el culo fijo en la silla con los 94 millones de euros de Cristiano Ronaldo.

Las gentes intuyen que hay algo perverso en todo esto. Y con razón: el capitalismo es muy perverso.

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9 comentarios:

MarioJPC dijo...

Pues si, la verdad es que chirria. Pero si lo dices muy alto es que eres del Barça. De todas formas, si en 3 meses no ganan partidos... ya saben de quién es la culpa, je.
Mira mi blog que tengo algo nuevo. Abrazos.

Javi dijo...

La verdad es que soy bastante merengón (no intenté luchar contra la herencia deportiva familiar y me adscribí acríticamente al Madrí). Ah, y del Sporting, of course.

Anónimo dijo...

pues esto, como el interfecto, va a ser un crack.
La burbuja balompédica van a llamrle.


mitxel

Javi dijo...

Un colega me dijo el 7-J: "estuve buscando la papeleta de Florentino Pérez para votarle, pero no la encontré". No sé si Cristiano Ronaldo será el inicio de la burbuja balompédica, pero, al igual que pasa con los que crearon las otras burbujas, hay fe ciega en quienes las promueven...

Soria dijo...

Otro grito más contra alguien que hace lo que le sale del cipote del dinero que es del Madrid y punto.

Si el Madrid pierde dinero, es cosa del Madrid y punto, no del Barça ni de todos esos que hoy se echan las manos a la cabeza por gastarse ese dinero en un jugador que se va a pagar a sí mismo en un año y no por desperfectos que costaron 20 millones de las antiguas pesetas por la celebración de un título.

¿Por qué no lo pagó eso el Barça de su bolsillo? Si es que nos escandalizamos ante lo que queremos.

Un saludo.

PD: Relacionarlo con la crítica al capitalismo es pervertir el fútbol, por favorrrlll.

Javi dijo...

¡Pero si precisamente digo que lo de los 95 kilos por Cristiano Ronaldo es de lo más normal! Literalmente que "es el pan nuestro de cada día".

Los bancos se dedican a ser bancos, uséase, a prestar dinero a quien:
a) puede devolvérselo (Florentino Pérez o a mi si tiengo curro fijo)
b) a los partidos políticos porque esos no tienen que devolvérselo...

Y de ese "a" y ese "b" no se salen, y el fichaje de Cristiano Ronaldo está dentro del caso "a".

¿Cómo voy a gritar contra lo que es inherente a la banca privada: intentar hacer todo el dinero que puedan?

Si el Estado da dinero a un banco, es para que siga siendo un banco, para que practique la usura, no para que se convierta en una entidad caritativa.

Yo, que abogo por ahorrarnos el rodeo y que ya que es el Estado el único que puede garantizar liquidez, que éste se encargue directamente (con criterios de interés público) de dar créditos, no puedo gritar contra el fichaje de Cristiano Ronaldo, que no se diferencia en lo sustancial de una hipoteca a cualquier familia: contra lo que grito, de estar gritando contra algo, es contra el sistema financiero.

Insisto, lo de Cristiano Ronaldo me parece de lo más habitual (como lo es tirar toneladas de alimento, algo tremenedamente habitual: las cosas funcionan así)

El sistema me parece perverso, lo de Cristiano Ronaldo es el día a día del sistema pero de una forma llamativa. El capitalismo con rostro humano no existe.

A bloguear dijo...

Todos los grandes genios terminan coincidiendo en las cosas importantes:
Hugo, tú y yo somos del mismo equipo.

A Hugo solo le queda ser del PCE para llegar a nuestra perfección.

Javi dijo...

Aunque seré mucho más del Madrid cuando lancen a Raúl por la roca tarpeya XD

A bloguear dijo...

Amén.